El Promedio Industrial Dow Jones (1896 - 2018)

Inma Fernández (*) y Santiago Niño Becerra (**) - Artículo Febrero '03


El Promedio Industrial Dow Jones


A lo largo del último cuarto del siglo XIX el panorama económico mundial experimentó modificaciones profundas que afectaron tanto al desarrollo del modo de producción imperante -el capitalista-, como a las potencias que ejercían el dominio del contexto internacional.

En los casi veinticinco años que median entre la proclamación de la Comuna de París y el inicio del siglo XX, el modo de producción capitalista sufrió una modificación esencial debido a que variaron las columnas sobre las que se sustentaba el crecimiento económico: de una sistemática industrial basada en el vapor, a otra fundamentada en la electricidad y en el petróleo.

Además, si desde principios del XIX había sido el Reino Unido la potencia hegemónica en el contexto internacional, en estos últimos años del siglo aparecieron dos nuevas potencias que fueron desempeñando un creciente protagonismo y que aceleradamente fueron desplazando a aquel en potencia industrial: el Imperio Alemán y Estados Unidos.

De éstas, y aunque en apariencia pudiera parecer lo contrario, la segunda mostraba unos fundamentos económicos mucho más sólidos, sobre todo porque en el país -en muchos aspectos aún en formación- las posibilidades de crecimiento eran más elevadas; en cualquier caso, en ambos se puso de manifiesto que eran precisas ingentes dosis de financiación para acometer los nuevos proyectos.

En el Imperio Alemán -y debido a la inercia histórica- para la búsqueda de recursos financieros se siguió una estructura basada en un muy desarrollado sistema bancario y en alianzas entre éste y las diferentes familias burguesas; en Estados Unidos, por el contrario, esta búsqueda de recursos financieros siguió un modelo sustentado en el recurso de capitales ajenos, por lo que los mercados de valores rápidamente alcanzaron un destacado protagonismo.

La rápida evolución de estos mercados en un entorno de crecimiento acelerado fue poniendo de manifiesto la necesidad de disponer de información financiera de forma rápida y fidedigna; este hecho generó la aparición de una faceta del periodismo prácticamente desconocida hasta estos momentos: el periodismo económico.

Charles H. Dow era un periodista que en 1879 comenzó a interesarse por los aspectos financieros del periodismo. En 1880 se trasladó a Nueva York y se incorporó a la agencia de noticias Kierman News en la que también trabajaba otro periodista de nombre Edward D. Jones.

En Noviembre de 1882 Dow y Jones abandonan Kierman y fundan Dow & Jones Company con el objetivo de informar sobre sobre el entornp financiero. En 1883 Dow & Jones Company comienza a imprimir una hoja que contenía noticias financieras del día y que pocos años después se convertiría en el periódico “The Wall Street Journal”.

En aquel proceso de rápida expansión en que la economía estadounidense estaba inmersa, Dow percibe la enorme dificultad de los compradores y vendedores de valores bursátiles para seguir las variaciones diarias de las acciones que negociaban. En 1884 diseña un promedio formado por la media aritmética de las cotizaciones diarias de los once valores más importantes del momento, la mayoría pertenecientes a compañías ferroviarias.

Durante los dos años siguientes Dow incorporó nuevas compañías al índice y reduciendo el número de las ferroviarias hasta que en el Otoño de 1896 las elimina totalmente coincidiendo este hecho con la publicación diaria del índice en The Wall Street Journal a partir del 7 de Octubre. Había nacido con su actual estructura el Dow Jones Industrial Average Index, el Promedio Industrial Dow Jones (PIDJ). En 1916 el número de valores que integraban el índice fue aumentado a 20 y en 1928 a 30, número que ha permanecido invariable hasta nuestros días.

A lo largo de su vida profesional Charles Dow fue realizando anotaciones minuciosas referentes a las oscilaciones que se producían en las cotizaciones de las acciones y que posteriores analistas recogieron y agruparon con la denominación de Teoría de Dow. (Ralph J. Acampora, “An explanation of Dow Theory”. Smith Barney, Harris Upham & Co.).

Lo que la Teoría de Dow viene a decir es que en la evolución de las cotizaciones bursátiles existen tendencias que se agrupan en diferentes tipos de movimientos y que el Promedio Industrial Dow Jones debe confirmar estas tendencias durante los períodos de tiempo en que se producen.

Es decir, la evolución del Promedio Industrial Dow Jones recoge, como si de una película se tratara, las oscilaciones que se han ido produciendo en la economía estadounidense ya que aquel no es más que un reflejo de la evolución de ésta, por lo que las caídas recesivas que la Historia Económica muestra que han tenido lugar en la economía de Estados Unidos -y por extensión en la mundial- serán recogidas en la evolución del Dow Jones, por lo que los análisis astrológico e histórico de los períodos recesivos del Dow Jones estarán dando información sobre la realidad económica de Estados Unidos y del planeta debido a la creciente importancia mundial de esta economía, máxime considerando que hoy la economía estadounidense representa casi el 25% de la mundial y que la capitalización de los valores que a finales de 1999 integraban el PIDJ representaban el 28% de la capitalización del mercado de valores de Estados Unidos.

El Gráfico 1 recoge la evolución del PIDJ entre 1896 y el 31 de Diciembre del 2002. A lo largo de la línea de evolución pueden observarse una serie de valles, algunos de los cuales han constituido recesiones recogidas y documentadas por la Historia Económica. Precediendo a dichos valles también se aprecian cúspides parciales indicativas de los máximos alcanzados por el Dow Jones antes de cada recesión.



Fuente: Elaboración propia a partir de los cierres mensuales del Dow Jones Industrial Average Index tomados de Wren Research Pty Ltd.



Las veintidós recesiones que en la economía estadounidense se han producido desde la aparición del Dow Jones constituyen un conjunto de instantes que son consecuencia de hechos y actuaciones anteriores, actuaciones y hechos que se produjeron en entornos determinados por aspectos e interrelaciones astrológicas concretas.

El análisis estadístico por medio del ajuste de un modelo exponencial de los máximos alcanzados por el PIDJ antes de cada recesión y de los mínimos a los que llegó el índice en cada recesión, junto al análisis de las correlaciones estadísticas entre ambos valores en períodos concretos, es decir, en fases de la evolución de la economía estadounidense -y mundial, no lo olvidemos-, muestra la vinculación entre los parámetros económicos característicos de esas fases. El Cuadro 1 resume el grado de vinculación existente en cada fase.


Cuadro 1 Fases de la economía estadounidense en función de sus período recesivos


(1) Corresponde a todos los cierres mensuales desde 1988 debido a que en esta fase únicamente se han producido dos recesiones, no habiendo aún finalizado la actual iniciada oficialmente en Marzo del 2001,

Fuente: Elaboración propia a partir de los cierres mensuales del Dow Jones Industrial Average Index tomados de Wren Research Pty Ltd.



El marco astrológico del Promedio Industrial Dow Jones




En cada una de estas fases se da una correlación estadística entre los valores máximos antes de cada recesión y mínimo de cada recesión que queda confirmada por la tipificación astrológica característica de ese período.


Desde el punto de vista astrológico, quedan delimitadas cinco fases, fundamentadas cada una de ella, de cara a las recesiones que se produce, por los Ciclos Mayores expuestos a continuación. Teniendo en cuenta que, en todas las fases, los momentos recesivos van a tener que ver, de un modo u otro, con el tránsito de Saturno generando tensión al Ciclo de ese período.




(*) - Inma Fernández, Estudios empresariales Creadora de la línea astrológica Círculo Atenea
(**) - Santiago Niño Becerra, Catedrático de Estructura Económica, Universidad Ramón Llull, Barcelona, España.